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Eine gepflegte Lokation mit z.B. Restaurant, Weinmuseum, Shop & Möglichkeit zur Weinprobe. Unsere gebuchte Weinprobe war tatsächlich nur am Tisch für uns zwei, die Weinvorstellung war für uns eher dünn und unleidenschaftlich. Das Gesellige einer Weinprobe mit anderen zusammen hat gefehlt.

Ist unbedingt einen Besuch wert - kostenloser Eintritt mit Audioguide - Shop mit Verkostung - Restaurant mit super Ausblick auf den Atlantik - plant min 2,5h ein ( 1h Museum - 1,5h Restaurant incl Siesta auf der Terrasse) hatte den Thunfisch-Tatar für 17€ und ein Bier 🍺 für 2,30€ - ich hab' es genossen

Bueno... El lugar con la terraza es precioso... Tiene unas vistas muy bonitas y el lugar tranquilo. Decir que fuimos a comer tras la buena experiencia de un brunch... Pero ha sido una decepción!! La crema de calabazin, incomestible...el sabor del calabazin brillaba por su ausencia y tenía un tono picante por el que no se podía comer. El pescado, bueno se supone que estaba en el plato, pero por 25€ nos da que era pescado invisible y las papas ya ni les cuento lo invisibles que eran!!..una papa pequeña cortada en dos y puestas en cada extremo del plato. Pedimos botellas de agua: resulta que te sirven agua de la llave en una botellas recicladas de cristal de vino, que además traen abiertas a la mesa. Los tortellini de queso... Buenos pero la pasta no sabía a nada, solo a agua y la salsa que los acompañaba era una sopa. La atención de uno de los camareros.... No sabemos ni como describirla: no sabía que platos habíamos pedido, comentarios que no venían a cuento o de mal gusto sobre los platos, llegaba a la mesa gritando que platos traía y para quien eran, retiraba los platos desde una esquina de la mesa metiendoce por delante de los comensales ya que ni se molestaba en dar la vuelta por la mesa para retirarlos, se le pedian bebidas que se olvidaba de traer y luego "discutía" con la persona que pedía la bebida si era para esa persona o no.... Las ensaladas, las croquetas, el escalón (aunque le sobraba un poco de cebolla) el salmorejo, estaba bastante buenas. En la cuenta no fijamos de que nos habían cobrado 10.50€ por cortar la tarta que nosotros llevamos (era un cumpleaños).... Nadie nos dijo que cobraran y tampoco nos dieron opción a cortarla nosotros, ya que trajeron la tarta sin platos ni cubiertos.... Con lo cual... Te aguantas y pagas ese extra no indicado!!! En NINGÚN restaurante en los que hemos celebrado un cumpleaños nos han cobrado por cortar la tarta que llevamos.... Para flipar!! En fin ha sido un desastre. Por nuestra parte para almorzar no vamos a a volver... Y es una lástima, pero la comida no vale el precio que hemos pagado y el abuso de cobrarnos por cortar la tarta menos aún!!. Además de que no vamos a recomendarlo para nada.

Facile d'accès, accueil chaleureux. Audio guide en français en plys de l'anglais et l'allemand. Visite gratuite du musée et le top c'est la dégustation après la boutique. Le personnel est très sympathique. La dégustation au choix 3 / 4 ou 5 verres avec fromage et charcuterie pour 12 / 18 et 24 Euros. Très bonne halte avant de rentrer à l'hôtel.

Great experience! Nice wine and food.